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Precalentar el horno a 200 °C. Cortar los extremos de las cabezas de ajo, por ambos lados para exponer los dientes. Colocarlos en aluminio con un pedazo de papel. Rociar el Aceite Sabrosano sobre los dientes de ajo expuestos y cerrar el papel aluminio. Dejar un espacio libre encima de cada cabeza de ajo.
Introducir las cabezas de ajo al horno y dejar cocinar de 50 minutos a una hora. Comprobar que el ajo tomó un bonito color dorado. Dejar enfriar.
Ya que el ajo se enfríe, apretar y sacar los dientes. Combinarlos con la mantequilla suave y hacerlos puré hasta que se mezclen bien. Añadir el perejil y revolver con una espátula hasta mezclar.
Usando el cuchillo de sierra, cortar el pan a la mitad. Con una brocha pastelera, untar el pan ligeramente con Aceite Sabrosano. Seguido de la mezcla de mantequilla y ajo. Colocar un poco de queso parmesano rallado sobre los panes y colocarlos en una bandeja para hornear.
Colocar un poco de queso parmesano rallado sobre los panes y colocarlos en una bandeja para hornear. Bajar la temperatura a 150 °C y cocinar el pan durante unos 10 minutos.
Cortar y disfrutar el pan crujiente por fuera y suave por dentro.
Pan al horno: la sencillez servida para un gran apetito
Para nuestro Pan al horno, te recomendamos usar una baguette de pan sourdough french bread, que está preparada con masa madre. Sin embargo, si no la encuentras, trata de conseguir una baguette normal, un birote o cualquier pan que tenga una buena costra, para que quede deliciosamente dorado.
