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Si hay un olor capaz de llenar la casa de antojo instantáneo, ese es el del pan de ajo recién horneado. Sólo imagina el crujido de la corteza dorada, el toque de mantequilla derritiéndose y ese perfume irresistible que anuncia que algo delicioso está por salir del horno. Este clásico, amado en todo el mundo, es la prueba de que lo simple puede ser espectacular.
Lo mejor es que hacerlo en casa es facilísimo, no necesitas ser chef para lograr prepararlo. Con unos cuantos ingredientes y el toque especial del Aceite Sabrosano Mantequilla, lograrás un resultado espectacular con el sabor cálido y casero que solo tú puedes darle.
Pan de ajo, el aroma que conquista desde el primer instante
Su historia se remonta a la cocina mediterránea, especialmente a Italia, donde el pan era el lienzo perfecto para aprovechar el ajo, el aceite de oliva y las hierbas frescas. Con el tiempo, se volvió un imprescindible en todo el mundo, presente en reuniones y cenas familiares.
Lo que lo hace especial es su versatilidad, ya que, se puede acompañar con pastas, sopas, carnes o como aperitivo. Y si lo conviertes en pan de ajo con queso, el resultado es aún más irresistible: un centro suave, una cubierta dorada y ese equilibrio perfecto entre lo crujiente y lo cremoso. Es el tipo de receta que se roba el protagonismo, aunque no sea el plato principal.
INGREDIENTES
- 1 Baguette
- 1 Barra de mantequilla
- 2 Cabezas de ajo
- 2 Cucharadas de perejil picado
- Aceite Sabrosano
- 2/3 Taza queso parmesano rallado
Precalentar el horno a 200 °C. Cortar los extremos de las cabezas de ajo, por ambos lados para exponer los dientes. Colocarlos en aluminio con un pedazo de papel. Rociar el Aceite Sabrosano sobre los dientes de ajo expuestos y cerrar el papel aluminio. Dejar un espacio libre encima de cada cabeza de ajo.
Introducir las cabezas de ajo al horno y dejar cocinar de 50 minutos a una hora. Comprobar que el ajo tomó un bonito color dorado. Dejar enfriar.
Ya que el ajo se enfríe, apretar y sacar los dientes. Combinarlos con la mantequilla suave y hacerlos puré hasta que se mezclen bien. Añadir el perejil y revolver con una espátula hasta mezclar.
Usando el cuchillo de sierra, cortar el pan a la mitad. Con una brocha pastelera, untar el pan ligeramente con Aceite Sabrosano. Seguido de la mezcla de mantequilla y ajo. Colocar un poco de queso parmesano rallado sobre los panes y colocarlos en una bandeja para hornear.
Colocar un poco de queso parmesano rallado sobre los panes y colocarlos en una bandeja para hornear. Bajar la temperatura a 150 °C y cocinar el pan durante unos 10 minutos.
Cortar y disfrutar el pan crujiente por fuera y suave por dentro.
¿Cómo hacer pan de ajo fácil y delicioso
Hacer receta pan de ajo casero es más sencillo de lo que imaginas, pero hay pequeños detalles que lo elevarán de rico a delicioso:
- Usa pan del día anterior, una baguette firme o bolillo ligeramente duro absorbe mejor la mezcla de ajo y aceite sin volverse aguado.
- Aplasta el ajo, no lo piques demasiado, para liberar más sabor sin que se queme al hornear.
- Si quieres una versión más cremosa, añade un toque de queso mozzarella o parmesano antes de meterlo al horno.
- Agrega perejil, romero o albahaca justo al final, cuando salga del horno, para un aroma espectacular.
- Si te sobran rebanadas, guárdalas en el congelador: solo necesitas unos minutos en el horno para tener pan de ajo crujiente listo cuando quieras.
TIP SABROSANO: Agrega Aceite Sabrosano Mantequilla, así obtendrás una textura más ligera y un dorado parejo, ya que resiste muy bien el calor y realza el aroma del ajo sin engrasar el pan.
Sorprende a tus familiares con la receta pan de ajo casero
Preparar esta receta es muy sencillo, sólo tienes que mezclar, untar, hornear y dejar que la casa se llene de ese aroma tan reconfortante. Además, es una receta que te hace lucir como experta sin esfuerzo, ya que va bien en cenas elegantes, comidas familiares o cuando simplemente quieres consentirte.
El ajo, además de delicioso, tiene propiedades antioxidantes y ayuda al sistema inmunológico, así que, cada bocado tiene su dosis de bienestar.
Y al final, lo mejor es ese momento de sacar la charola del horno, ver el dorado perfecto y escuchar su crujir al partirlo. En ese instante sabes que hiciste algo maravilloso, para disfrutar y compartir.
Preguntas frecuentes
Pan al horno: la sencillez servida para un gran apetito
Para nuestro Pan al horno, te recomendamos usar una baguette de pan sourdough french bread, que está preparada con masa madre. Sin embargo, si no la encuentras, trata de conseguir una baguette normal, un birote o cualquier pan que tenga una buena costra, para que quede deliciosamente dorado.
